La Catequesis del Buen Pastor ha descubierto la misteriosa relación entre Dios y el Niño, el ambiente especial de silencio y recogimiento que necesita el pequeño y el acompañamiento que requiere del adulto para que pueda “acercarse a Dios por sí mismo”.
En estos tiempos en los que nuestros Atrios permanecen cerrados por la contingencia y que